sábado, 1 de febrero de 2014

Te amo...

Te amo.
Te amo porque si, no tengo muchos motivos.
Te amo porque te extraño, porque te necesito, porque te amo.
Te amo para que me cuides, para que me abraces, para mirarte de lejos.
Te amo porque sos asi, testarudo, sin escrupulos, mal llevado, simpatico.
Te amo porque no puedo no verte, no puedo no sentirte, no puedo no besarte.
Te amo porque a pesar de todo seguis aca.
Te amo porque sos experiencia, porque me enseñas y porque aprendo.
Te amo porque me haces sonreir, y tambien llorar.
Te amo porque no puedo odiarte.
Porque sos mucho, porque sos casi todo.
Te amo porque estas aca.
Te amo porque no estuviste antes.
Te amo porque sos mio. Y porque sabes del mundo.
Te amo porque me das libertad, porque me enseñaste como ser libre.
Te amo porque si, y porque no?
Te amé sin querer, y ahora te amo queriendo.
Te amo para mi.
Te amo porque sos asi.
Te amo por lo que me haces sentir.
Te amo porque sino te odiaria.
Te amo porque es lo que quiero hacer.
Te amo. Es simplemente eso. Te amo.

Somos enormes...

¿Alguna vez pensaron en su tamaño? No como persona, cada persona es individual de su altura, su peso, su fisionomia... En su tamaño como humano, en el tamaño de nuestra especie.
Somos ENORMES. Comparense con una hormiga, somos 100.000 veces más grandes, y con un veneno podemos matar a 1000 en un segundo. Comparense con un mosquito, por mas que pueden volar, nosotros de un manotazo los matamos sin pensar que están recogiendo el alimento para sus crías. Somos enormes. Somos destructivos.
Y somos pequeños. Somos un gota en el rio si nos comparamos con el mar, y a la vez, una gota mas pequeña en el mar, si nos comparamos con el océano... Podemos asesinar especies enteras en un par de dias, pero si una ola nos ataca, morimos.
Tenemos poder suficiente para crear una bomba que haga explotar un pais entero, pero no tenemos el poder suficiente para sobrevivir a tal bomba. Somos la unica especie que se asesina sola. Que se rechaza a si misma. Que necesita ser otra especie...
Somos enormes solo cuando somos destructivos, y somos tan pequeños cuando nos destruyen.